Prevenga enfermedades con los chequeos personales

Las últimas teorías en medicina preventiva recomiendan los chequeos personales como unos de los mejores métodos para detectar a tiempo diferentes dolencias.

Por eso, el momento ideal es la mañana, no bien nos levantamos de la cama y aprovechando que el organismo está descansado y relajado.

En principio, es bueno chequear el pulso que indicará en líneas generales, en que condición física estamos.

Proceda de la siguiente manera, siéntese en el borde de la cama, espere unos minutos y ubique el pulso en la muñeca o el cuello, cuente los latidos por 20 segundos, multiplique por tres y obtendrá un número que en las mujeres debe ser entre 60 y 80 latidos por minutos, si se eleva a más de 80, consulte a su médico.

Sin obsesionarse más de la cuenta. trate de pesarse una vez por semana. Un aumento o descenso brusco en el peso puede alertar sobre la necesidad de modificar la alimentación y los hábitos de vida o, también, puede indicar algún problema en la glándula tiroides. Más allá de una simple cuestión estética, las uñas pueden servir para advertir problemitas de salud.

Cuando están levemente curvadas hacia arriba, puede deberse a deficiencias de hierro, si la parte superior, la región próxima a la media luna tiene color blancuzco indicaría alguna complicación hepática.

Por último termine este chequeo personal analizando la piel de todo el cuerpo. Con la ayuda de un espejo, revise lunares y manchas tratando de detectar si cambiaron de forma y color o si hay lastimaduras que nunca parecen cicatrizar.

Mediante esta revisión sencilla pueden detectarse y prevenir algunas dolencias.